Una problemática que persigue a millones de chicos y chicas alrededor del mundo y que como resultado directo o indirecto es la causa de unas 200 muertes por año.
Según la Unesco, al menos 246 millones de niños y niñas sufren violencia escolar cada año a nivel mundial, una problemática que «enferma a miles de estudiantes que en general abandonan sus estudios o los sobrellevan con angustia y cansancio», destacó la ONG Bullying Sin Fronteras.
La iniciativa por el Día Mundial Contra el Acoso Escolar nació en 2013 a partir de una presentación de esa ONG y fue aprobada por la Unesco con el fin de ayudar a la concientización de este problema.
Posteriormente, fue reconocido oficialmente por el Parlamento español, el Senado argentino y el Parlamento uruguayo.
Edgardo Néstor De Vincenzi, presidente de la Confederación Mundial de Educación (Comed), señaló en una nota enviada a Télam que «a fines de 2019, la organización ‘Bullying Sin Fronteras’ dio estadísticas de las aulas de colegios primarios y secundarios, públicos y privados, de la Argentina, y estableció un crecimiento del 30% de casos respecto de 2018».
«Casi la mitad de ellos se produjeron en escuelas de los grandes centros urbanos: provincia de Buenos Aires, Capital Federal, Santa Fe, Córdoba y Mendoza», agregó.
De Vincenzi, que también es presidente de la Federación de Asociaciones Educativas de América Latina y el Caribe (Faela), insistió en subrayar que es la familia la que tiene un rol central en esta problemática.
«El bullying no se trata de algo de ricos o pobres, se trata de los valores que se cultivan en el seno familiar. Es decir que, en este problema creciente, la esencia y el gen, están en la familia», aseguró, aunque añadió que «en la lucha contra el bullying, la familia, la escuela, la sociedad y el Estado conforman un todo, en donde cada una de estas partes se encadena y retroalimenta. No hay que mirar para otro lado», concluyó.
En tanto, Javier Miglino, fundador de Bullying Sin Fronteras, destacó que «el bullying es un enemigo silencioso que se nutre de tres venenos: la soledad, la tristeza, el miedo» y «entre las acciones de acoso escolar puede identificarse: el ciberacoso, el bloqueo social, hostigamiento, manipulación, coacciones, intimidación, agresiones, amenazas, acoso escolar homofóbico, entre otras».